En el año 1976 el grupo norteamericano Eagles lanzó una canción de seis minutos y medio de duración que, en mayo de 1977, alcanzó el número 1 en el ranking Bilboard Hot 100. Este mismo tema, con el paso de los años, se convertiría en un clásico instantáneo y en su single más famoso: “Hotel California”. Compuesta por el baterista y vocalista Don Henley, y los guitarristas Don Felder y Glenn Frey, la letra del tema hablaba, según sus autores, “del lado oscuro del sueño americano y el exceso en Estados Unidos”, especialmente el referido al uso de drogas duras.
Sin embargo, la canción, con el paso del tiempo, se convertiría en objeto de controversia, ya que algunos medios de prensa echaron a rodar una bola que aseguraba que la canción era satánica, y aludía en su letra a un lugar bastante parecido al infierno.
Los primeros rumores indicaban que el título “Hotel California” aludía al culto al diablo, pues supuestamente aludía a la dirección donde el famoso satanista Anton Szandor La Vey, quien se autoproclamó como el Papa negro o Papa oscuro, fundó en abril de 1966 la Iglesia de satán (California Avenue, en San Francisco). Estos mismos rumores aseguraban que en ese lugar los integrantes del grupo Eagles habrían hecho un pacto demoníaco y, después de realizarlo, habrían escrito la famosa canción.
La letra del tema, escrita por Don Henley, trata de un hombre que llega al misterioso Hotel California, un lugar “que podría ser el cielo o el infierno”. Allí es recibido por una mujer, que para algunos es una especie de sacerdotisa que quiere iniciar al recién llegado en la Iglesia de satán. Pero este forastero no es el primero en llegar allí, ya que escucha unas voces de bienvenida en el pasillo, de los acólitos que forman una especie de misteriosa congregación, misteriosa porque “son prisioneros allí por su propia voluntad”. Más adelante, las mismas voces lo despiertan a la medianoche, para que participe en una especie de ceremonial. El hombre contempla el ritual de un sacrificio donde se usan “cuchillos acerados”, pero el sacrificio no se consuma porque “no se puede matar a la bestia”. Así que el forastero, impresionado por lo que ha visto, opta por echar a correr hasta la puerta para intentar escapar de ese lugar profano. Sin embargo, un “hombre de la noche” le dice unas enigmáticas palabras que lo dejan helado: “Puedes cancelar tu reservación cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”.
Los extractos supuestamente satánicos de la letra de la canción “Hotel California” se centran sobre todo en la frase “They stab it with their steely knives, but ther just can´t kill the beast” (“Ellos le apuñalan con sus cuchillos de acero, pero no pueden matar a la bestia”), que aludiría, según algunos, a rituales satánicos de sacrificios. Otra frase de la canción dice: “He said “We haven´t that spirit here since 1969″ ” (“Él dijo:”No hemos tenido ese espíritu desde 1969″), que aludiría según algunos al año en el que se publicó la “Biblia satánica”, escrita por el mencionado satanista Anton Szandor La Vey.
Tampoco faltaron los que aseguraron que había un mensaje satánico oculto en la canción, pues si la frase “This could be Heaven or this could be Hell” (“Esto puede ser el Cielo o puede ser el Infierno”), se reproducía en sentido inverso, supuestamente se podía escuchar el siguiente mensaje: “Yeah, Satan. How he organized his own religion / Yeah, well he knows he should. How nice!” (“Sí, Satán. Cómo organizó su propia religión. Sí, él sabe bien que lo haría. ¡Qué maravilla!”).
La última frase de la canción es una de la más explícitas en cuanto a la posible referencia al infierno: “You can check out anytime but you can never leave” (“Puedes cancelar tu reserva cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”), aunque algunos fanáticos aseguran que toda la letra de la canción alude en realidad a la estadía de un paciente en el hospital psiquiátrico estatal de Camarillo, situado entre Los Ángeles y Santa Bárbara, que cerró en 1997 y al que se le llamaba precisamente Hotel California. La canción, entonces, relataría la experiencia de un internado en ese hospital. Otra interpretación parecida aseguraba que el Hotel California era una clínica de rehabilitación para que los drogadictos se recuperaran de sus adicciones.
La portada muestra un hotel de estilo español, del cual se decía que era el cuartel general de los miembros de la Iglesia de satán, aunque en realidad la fachada corresponde al Hotel Beverly Hills, conocido como Pink Palace y ubicado en la avenida Sunset Boulevard. Pero, en la carpeta interior del álbum, aparece una foto con el grupo en pleno posando en el vestíbulo de otro hotel (el Lido de Hollywood). Si se mira con cuidado hacia la parte superior, en uno de los balcones, en medio de la penumbra, aparece un tenebroso y misterioso personaje, calvo y con una afilada barba en forma de perilla, de quien muchos aseguraron que se trataba del mismo Papa negro, Anton Szandor La Vey. La banda, consultada por este hecho, sólo replicó diciendo que se trataba de una planta decorativa y, mucho después, afirmó que era una persona que se puso en el balcón por error.
Con respecto a la existencia real del Hotel California, la verdad es que sí existe un Hotel California en Todos Santos, en la península de Baja California, México, pero los integrantes de los Eagles aseguraron que jamás habían pasado la noche allí, por lo que era imposible que hubieran escrito la canción en ese lugar. Don Henley, el líder del grupo Eagles, explicó que “a lo largo de los años escuché rumores sobre ese hotel, pero puedo decir inequívocamente que ni yo ni ninguno de los otros miembros de la banda hemos tenido ningún tipo de asociación – por negocios o placer – con ese establecimiento. Ese hotel fue establecido después de que nuestro tema “Hotel California” se volviese popular y parece ser un intento ostensible de capitalizar con la popularidad de la canción”.
El mismo Henley negó de plano que la canción “Hotel California” aludiera al satanismo, pues en realidad “capturaba el espíritu decadente de la época, un tiempo de grandes excesos en este país y en el negocio de la música en particular”. El guitarrista Glenn Frey, en tanto, especificó que la canción hablaba de la adicción a la cocaína, un metafórico “hotel” del que es imposible escapar una vez que se ha entrado en él. “La canción ‘Hotel California’ habla en contra del exceso de cocaína. Nosotros no siempre hemos hecho las cosas con moderación, pero nos estábamos imaginando cómo te quemas lentamente, en el largo plazo, por el uso de drogas”. Con respecto al supuesto mensaje satánico que se puede escuchar si el tema se reproduce al revés, el segundo bajista de los Eagles, Timothy B. Schmit, afirmó que “lo único que pasa si pones el disco al revés es que se va a rayar. No hay nada de eso en ese disco”.
Para algunos, los rumores de satanismo que rodean a la canción “Hotel California” no son para nada infundados, mientras que para otros el significado real de la canción sólo alude al espíritu de exceso y decadencia que caracterizó a los lejanos años 70’, década donde vivió su época de oro el denominado rock clásico.
Sin embargo, la canción, con el paso del tiempo, se convertiría en objeto de controversia, ya que algunos medios de prensa echaron a rodar una bola que aseguraba que la canción era satánica, y aludía en su letra a un lugar bastante parecido al infierno.
Los primeros rumores indicaban que el título “Hotel California” aludía al culto al diablo, pues supuestamente aludía a la dirección donde el famoso satanista Anton Szandor La Vey, quien se autoproclamó como el Papa negro o Papa oscuro, fundó en abril de 1966 la Iglesia de satán (California Avenue, en San Francisco). Estos mismos rumores aseguraban que en ese lugar los integrantes del grupo Eagles habrían hecho un pacto demoníaco y, después de realizarlo, habrían escrito la famosa canción.
La letra del tema, escrita por Don Henley, trata de un hombre que llega al misterioso Hotel California, un lugar “que podría ser el cielo o el infierno”. Allí es recibido por una mujer, que para algunos es una especie de sacerdotisa que quiere iniciar al recién llegado en la Iglesia de satán. Pero este forastero no es el primero en llegar allí, ya que escucha unas voces de bienvenida en el pasillo, de los acólitos que forman una especie de misteriosa congregación, misteriosa porque “son prisioneros allí por su propia voluntad”. Más adelante, las mismas voces lo despiertan a la medianoche, para que participe en una especie de ceremonial. El hombre contempla el ritual de un sacrificio donde se usan “cuchillos acerados”, pero el sacrificio no se consuma porque “no se puede matar a la bestia”. Así que el forastero, impresionado por lo que ha visto, opta por echar a correr hasta la puerta para intentar escapar de ese lugar profano. Sin embargo, un “hombre de la noche” le dice unas enigmáticas palabras que lo dejan helado: “Puedes cancelar tu reservación cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”.
Los extractos supuestamente satánicos de la letra de la canción “Hotel California” se centran sobre todo en la frase “They stab it with their steely knives, but ther just can´t kill the beast” (“Ellos le apuñalan con sus cuchillos de acero, pero no pueden matar a la bestia”), que aludiría, según algunos, a rituales satánicos de sacrificios. Otra frase de la canción dice: “He said “We haven´t that spirit here since 1969″ ” (“Él dijo:”No hemos tenido ese espíritu desde 1969″), que aludiría según algunos al año en el que se publicó la “Biblia satánica”, escrita por el mencionado satanista Anton Szandor La Vey.
Tampoco faltaron los que aseguraron que había un mensaje satánico oculto en la canción, pues si la frase “This could be Heaven or this could be Hell” (“Esto puede ser el Cielo o puede ser el Infierno”), se reproducía en sentido inverso, supuestamente se podía escuchar el siguiente mensaje: “Yeah, Satan. How he organized his own religion / Yeah, well he knows he should. How nice!” (“Sí, Satán. Cómo organizó su propia religión. Sí, él sabe bien que lo haría. ¡Qué maravilla!”).
La última frase de la canción es una de la más explícitas en cuanto a la posible referencia al infierno: “You can check out anytime but you can never leave” (“Puedes cancelar tu reserva cuando quieras, pero no puedes marcharte nunca”), aunque algunos fanáticos aseguran que toda la letra de la canción alude en realidad a la estadía de un paciente en el hospital psiquiátrico estatal de Camarillo, situado entre Los Ángeles y Santa Bárbara, que cerró en 1997 y al que se le llamaba precisamente Hotel California. La canción, entonces, relataría la experiencia de un internado en ese hospital. Otra interpretación parecida aseguraba que el Hotel California era una clínica de rehabilitación para que los drogadictos se recuperaran de sus adicciones.
¿Foto satánica?
Pero los rumores de satanismo no sólo afectan a la letra y al título de la canción, sino que también afectan a las fotos utilizadas para la portada y la contraportada del disco en el que aparece el tema, titulado de igual forma.La portada muestra un hotel de estilo español, del cual se decía que era el cuartel general de los miembros de la Iglesia de satán, aunque en realidad la fachada corresponde al Hotel Beverly Hills, conocido como Pink Palace y ubicado en la avenida Sunset Boulevard. Pero, en la carpeta interior del álbum, aparece una foto con el grupo en pleno posando en el vestíbulo de otro hotel (el Lido de Hollywood). Si se mira con cuidado hacia la parte superior, en uno de los balcones, en medio de la penumbra, aparece un tenebroso y misterioso personaje, calvo y con una afilada barba en forma de perilla, de quien muchos aseguraron que se trataba del mismo Papa negro, Anton Szandor La Vey. La banda, consultada por este hecho, sólo replicó diciendo que se trataba de una planta decorativa y, mucho después, afirmó que era una persona que se puso en el balcón por error.
Con respecto a la existencia real del Hotel California, la verdad es que sí existe un Hotel California en Todos Santos, en la península de Baja California, México, pero los integrantes de los Eagles aseguraron que jamás habían pasado la noche allí, por lo que era imposible que hubieran escrito la canción en ese lugar. Don Henley, el líder del grupo Eagles, explicó que “a lo largo de los años escuché rumores sobre ese hotel, pero puedo decir inequívocamente que ni yo ni ninguno de los otros miembros de la banda hemos tenido ningún tipo de asociación – por negocios o placer – con ese establecimiento. Ese hotel fue establecido después de que nuestro tema “Hotel California” se volviese popular y parece ser un intento ostensible de capitalizar con la popularidad de la canción”.
El mismo Henley negó de plano que la canción “Hotel California” aludiera al satanismo, pues en realidad “capturaba el espíritu decadente de la época, un tiempo de grandes excesos en este país y en el negocio de la música en particular”. El guitarrista Glenn Frey, en tanto, especificó que la canción hablaba de la adicción a la cocaína, un metafórico “hotel” del que es imposible escapar una vez que se ha entrado en él. “La canción ‘Hotel California’ habla en contra del exceso de cocaína. Nosotros no siempre hemos hecho las cosas con moderación, pero nos estábamos imaginando cómo te quemas lentamente, en el largo plazo, por el uso de drogas”. Con respecto al supuesto mensaje satánico que se puede escuchar si el tema se reproduce al revés, el segundo bajista de los Eagles, Timothy B. Schmit, afirmó que “lo único que pasa si pones el disco al revés es que se va a rayar. No hay nada de eso en ese disco”.
Para algunos, los rumores de satanismo que rodean a la canción “Hotel California” no son para nada infundados, mientras que para otros el significado real de la canción sólo alude al espíritu de exceso y decadencia que caracterizó a los lejanos años 70’, década donde vivió su época de oro el denominado rock clásico.