El técnico del agresor se mostró satisfecho con la determinación y aseguró que el jugador será expulsado del equipo.
Una dura sanción emitió hoy la comisión disciplinaria del fútbol de Tirol, en Austria. El organismo dictaminó la suspensión por 70 partidos en contra del defensa Ismail Gündüz.
Todo ocurrió en el duelo entre SPG Innsbruck West y el SK Rum, de la liga regional de Tirol. El jugador, ante una supuesta falta en contra de él, no cobrada, le propina un cabezazo al juez del partido que le provocó una herida en uno de sus labios. Producto de la agresión, el encuentro fue suspendido y el referee tuvo que ser trasladado a un recinto asistencial.
Gündüz, en declaración al diario local Tiroler Tageszeitung, aseguró que todo fue un mal entendido; que resbaló y golpeó su cabeza contra la cara del colegiado. Sin embargo, las autoridades de la liga local no le creyeron y terminaron imponiéndole la dura sanción.
Además, el técnico de su propio equipo, Matthias Waldegger, se mostró satisfecho con la sanción. "En nuestro campo (este jugador) ya no jugará más", asegurando a un medio local que el zaguero será expulsado de la institución.